Cierto es que el sexo siempre será tema de intriga y debate, al hablar de sexo en reuniones o comidas, este tema siempre recibe más atención que los lindos bebés y los tiernos cachorros. ¡El sexo despierta y seduce tan sólo con palabras, porque el sexo se gana, se merece y se disfruta
La mayoría de las mujeres quieren saber 2 cosas: sus experiencias son normales y sus deseos no son extraños. Sin embargo, algunas mujeres suelen mostrase reacias a comunicar sus deseos a sus parejas, pues no se sienten tan cómodas hablando de sexo, y he aquí algunas de las razones: la sociedad, la familia y la religión, principalmente, la educación, las experiencias pasadas y los tabúes que giran en torno a esto. Así pues, se crea una desconexión que hace que disfrutar del sexo sea aún más desafiante.
Si eres hombre y estás leyendo esto, pon atención. La clave, como en todo, es escuchar o aprender a hacerlo. El placer de ambos es posible y fácil si se saben seguir las reglas del juego. Te describimos a continuación algunas cosas que las mujeres desearían que los hombres supieran sobre SEEEEEEXO:
1. LA PORNOGRAFÍA NO ES REAL.
Esto puede parecer obvio, pero la verdad es que probablemente aprendiste los conceptos básicos sobre el sexo de la pornografía a una edad temprana, preparando inconscientemente el escenario para tus expectativas sexuales. La pornografía es increíble; puede estimularte e inspirarte a probar cosas nuevas, sin embargo, se produce y edita como cualquier otra película.
Por favor, no esperes que tu pareja grite como si estuviera en llamas o brote de placer cual fuente de alameda. No va a pasar.
2. NOS ENCANTA HABLAR DE SEXO SIN ESPERAR QUE SUCEDA.
Hablar de sexo, lo que te gusta, lo que no te gusta y tus experiencias en el mismo, pueden ocurrir en la primera o segunda cita, si sientes que vibra es la adecuada. Ojo, hablar de ello no es una invitación, ni es un precursor de lo que pueda suceder después. Tener una conversación (preferiblemente lejos de un sofá) te permite crear la intimidad y la confianza necesarias para un buen sexo. Vas palpando terreno, acechas la presa, no te abalanzas sobre ella alocadamente. No hay tigre tonto.
3. DIBUJA UN MAPA DEL PLACER.
Ahora que ya dejaste de lado las conversaciones triviales, puedes intentar ser más específico al compartir lo que prefieras en un entorno más íntimo. Desafortunadamente, muchas mujeres se sienten incómodas al ser abiertas sobre su propio placer. Siempre puedes preguntar si está nerviosa y, de ser así, preguntar qué la tranquilizaría más.
Dibuja un mapa del placer con las manos de tu cuerpo para que puedas ver y sentir lo que el otro prefiere. Por ejemplo, si estás acariciando la espalda de tu pareja y ella se mueve, pregúntale si este punto es particularmente sensible. Tome nota mental, aprende de ello. Ir conociendo poco a poco la sensibilidad de tu pareja asegura un éxito brutal en tus relaciones.
4. ACERCA DE NUESTRO CLÍTORIS.
Los cuerpos de las mujeres son increíblemente variados. Lo que agrada a uno puede no provocar nada en el otro. Lo mismo ocurre con la forma de manejar los clítoris. A algunas mujeres les gusta mucha presión, a otras no. Según un estudio del Instituto Kinsey para la Investigación en Sexo, Género y Reproducción, entre el 70% y el 90% de las mujeres no pueden alcanzar el orgasmo solo mediante la penetración. La mayoría de las mujeres experimentan el orgasmo con la estimulación del clítoris, por lo que querrás conocer sus preferencias. Estimúlala, pregúntale cómo le gusta que la toquen o pídela verla masturbarse. Un espectáculo educativo.
5. CUANDO SE TRATA DE JUEGOS PREVIOS, OBTIENES LO QUE DAS.
Algunos hombres sienten que los juegos previos pueden desviar su atención de mantener una erección, lo cual es una preocupación justa. Sin embargo, hacer lo mínimo cuando se trata de juegos previos para que pueda llegar a la acción “real” producirá resultados medianos con el coito. Haz que tu placer sea el objetivo de los juegos previos, no algo para lograrlo. Esta también es una excelente manera de hacer que lo que te gusta sea una prioridad.
6. SOMOS DUEÑAS DE NUESTRO ORGASMO.
Esto requerirá un cambio de cableado de tu parte, ya que los hombres heterosexuales son socializados para creer que su valor se determina si una mujer tuvo un orgasmo o no. Tener un orgasmo es en parte físico, en parte mental, y su orgasmo es, en última instancia, su responsabilidad. No lo tomes como una afrenta personal si ella no tiene un orgasmo, ya que hacer del orgasmo el único objetivo del sexo abarata la experiencia. A las mujeres les encanta que hagas de su placer, tu misión personal, pero no creas que has fallado si no existe un orgasmo.
7. NO PUEDES CURAR SU TRAUMA.
Según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, más de una de cada tres mujeres experimentan violencia sexual que implicó contacto físico en algún momento de sus vidas. Con el debate sobre la agresión y el acoso sexual que se está poniendo de manifiesto, las mujeres se han vuelto más dispuestas a compartir sus experiencias con el trauma sexual. Si sospechas que tu pareja está lidiando con un trauma sexual, anímala a buscar el apoyo de un profesional de la salud mental. El buen sexo no resolverá su dolor y no es tu responsabilidad curarla de su pasado. Tener sexo es fácil, pero tener un buen sexo se trata más de una comunicación efectiva y menos de movimientos específicos. Se necesita voluntad para hablar sobre lo que le gusta y realmente escuchar e implementar lo que su pareja quiere. Si puedes crear un espacio seguro y abierto para que esto suceda, estás en camino de tener SEXO ÉPICO. ¡De nada!
Exelente artículo